El constructor aeronáutico europeo Airbus registró en el primer semestre del presente año 722 pedidos netos de aviones y 36 cancelaciones, según anunció ayer. Si el objetivo establecido para todo el año estaba en 800 encargos, es muy verosímil que el mismo sea sobrepasado con creces.
Sólo su futuro avión de largo alcance, el A350, una de las estrellas del pasado Salón de Le Bourget, consiguió un centenar de pedidos. Registró 85 pedidos del A350-900, cuya entrada en servicio está prevista en el segundo semestre del próximo año, y 15 encargos más del A350-1000, la mayor de las tres versiones del avión que competirá con el 787 y el 777 de Boeing. Aún no ha contabilizado este año pedidos para su A350-800, la menor de las tres versiones ni para el A380, en el que aparecieron el pasado año unas microfisuras en las alas de algunos aparatos.
Airbus lleva entregados en los seis primeros meses del presente año 295 aviones, entre ellos, ocho A380 de los 25 que tiene como objetivo entregar este año.