Los aviones tubohélice ATR de última generación han obtenido la
aprobación del Comité Interestatal de Aviación (IAC) de Rusia para
operar en tres pistas no asfaltadas de aeródromos rusos, situadas en
zonas remotas. Son: Mys Kamenny, Lensk y Bodaibo, a la que hay que
añadir la pista de Igrim, cuyo permiso lo obtuvo ATR el año pasado.
La certificación permite a las aeronaves ATR operar en pistas de
grava, tierra o hierba. Esta importante actualización del rendimiento
del ATR se logró pista por pista, ya que aviones ATR realizaron
previamente aterrizajes y despegues de prueba, que fueron evaluados por
ingenieros. Según informa ATR, otras pistas sin pavimentar se están
evaluando para que los ATR puedan operar en ellas.
Hoy, con la ventaja adicional de rendimiento, los aviones ATR son los
únicos turbohélices en producción de más de 50 pasajeros que han
recibido la certificación para operaciones en pistas no pavimentadas por
IAC. «La capacidad de aterrizar y salir de pistas sin pavimentar agrega
mayor flexibilidad operativa a una aeronave ATR ya excepcional y
robusta, que requiere modificaciones mínimas del fuselaje», dijo Carmine
Orsi, vicepresidente técnico de ATR.
Fuente: Aerotendencias.com