La compañía está revisando unidades ensambladas del Dreamliner para ver si muestran señales similares de tensión, que se ha atribuido a un calce incorrecto en un proceso aplicado por los manufactureros de aviones para rellenar pequeñas brechas durante la construcción de las aeronaves.
"Todos los aviones que fueron armados hasta el avión 55 tienen la posibilidad (de sufrir) el problema del calce", dijo a la prensa James Albaugh, presidente ejecutivo Boeing Commercial Airplanes, durante una mesa redonda con medios en Singapur.
Albaugh dijo que el problema era "muy solucionable".
"Estamos en el proceso de reparar los aviones que están en el curso (de producción)", declaró. "No existen problemas de seguridad o de vuelo en los aviones que hemos entregado".
Aunque por años se han usado partes hechas de compuestos de carbono, el 787 es el primer avión construido principalmente con los nuevos materiales, que ayudan a las aerolíneas a ahorrar combustible por la reducción en el peso del aparato.
Analistas han dicho que el descubrimiento de la falla, a unas nueve semanas de que el modelo entrara en funciones, ha generado dudas sobre la capacidad de Boeing de cumplir lo que muchos ven como un plan ambicioso para elevar la producción a hasta 10 aviones por mes desde finales del 2013 desde las 2,5 unidades actualmente.
Apegándose a los planes, Boeing espera elevar la producción mensual a 3,5 unidades en el segundo trimestre y a 5 para finales de año.
Fuente: Aviacion Digital / Boeing
